9.6.09

Turismo XXII

Usualmente, entre semáforo y semáforo, me imagino que el viento no existe, entonces los árboles se empiezan a mover por voluntad propia.

1 comentario:

Chiquita Violenta dijo...

qué es eso?

:(

Bueno ya he pensado en cambiarlo pero pues no sé, no consigo uno chido chido. Es este horrible pesar del "blogger" que busca la perfección

:(


Hola :)